Un destacado exponente del tiro Skeet, actual Campeón Nacional, es estudiante de cuarto año de Ingeniería Civil Metalúrgica en la Universidad de Concepción. Se trata de Hernán Corvalán Labra, quien en estos días está disputando un torneo sudamericano en Perú.
Días antes de su viaje conversamos con esta joven promesa deportiva y de ingeniería, quien se inició en este deporte siendo muy pequeño. “El tiro es como un deporte de tradición, parte de la familia. Mis abuelos disparan, les gusta cazar. Mi papá heredó esa pasión y así me enseñó a mí”, explicó Hernán, nacido y criado en Los Ángeles.
A los 8 años conoció la disciplina del tiro Skeet y le comenzó a ir muy bien. A los 10 años participó, por primera vez, en una competencia nacional. “El primer año que competí a nivel nacional, me costó un poco porque era un niño de 10 años compitiendo contra niños de 15, 16 y otros de 20 años. No se ven muchos jóvenes en este deporte porque no es tan conocido y me acuerdo de que de a poco comencé a acostumbrarme, a tomar vuelo, me empezó a ir bien. Por ahí gané un campeonato en categoría infantil y empecé a entrenar con un entrenador de la selección que era peruano. Él en su momento, fue medallista olímpico y ahí me empecé a involucrar con la gente que era de la selección nacional: Francisca Crovetto, Jorge Atalah, que son nombres que tienen más historia”.
Pero las condiciones deben fortalecerse por medio de la práctica y como en Los Ángeles no había canchas viajaba a Concepción cada dos semana. En eso estuve bastante tiempo, a los 13 o 14 años participó en su primera competencia internacional, donde obtuvo segundo lugar en categoría infantil. “Estuve muy cerca del primer lugar. Es un deporte que las diferencias son mínimas. Conocí gente que ahora está en lo más alto del mundo”, cuenta.
Hubo un periodo en que tuve que alejarme un poco para concentrarse en los estudios. Fueron como 2 años que estuvo sin competir y reapareció el 2016. “Ahí estaba más maduro, la mentalidad fue cambiando y me empezó a ir bien altiro, empecé a ser campeón juvenil muchas veces en el torneo nacional y empezamos a integrar parte de un grupo de interés nacional que teníamos como foco los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Estuve muy entusiasmado mucho tiempo, pero tuve que parar nuevamente, entré a la universidad y después fue todavía más duro, porque llevar el tema del deporte con el estudio se hace muy complicado”.
En ese tiempo que dejó de competir, se dedicó a jugar voleibol en la selección de la universidad, como una manera de mantener sus habilidades físicas para el momento de poder retomar, como también para su fortaleza mental, clave en el tiro. “Yo creo que el tiro es 85% pura cabeza, mucha mente, más que la técnica”.
De vuelta al ruedo
A mitad del 2021 volvió a la competencia, pero fue un periodo complicado porque llevaba mucho tiempo afuera, le costaba retomar los puntajes que estaba haciendo anteriormente. Tuvo un periodo de mucho entrenamiento intenso para poder volver a recuperar el nivel; sin embargo, empezó de lleno a meterse en el circuito nacional, siendo hoy Nº 1 en su categoría general (adulto)