Los docentes del Departamento de Ingeniería Química, José Matías Garrido y Andrés Mejía, recibieron el Premio Atenea a “Mejor Obra Científica” en la categoría de libros por su trabajo editorial en el libro “Termodinámica de procesos químicos”, de quien fuera su mentor, el profesor Hugo Segura Gómez, el pasado viernes 31 de mayo, junto al hijo del autor, Hugo.
Con orgullo y emoción, José Matías Garrido y Andrés Mejía, académicos del DIQ, recuerdan el momento en que decidieron reunir los apuntes que el fallecido profesor había comenzado a redactar a mediados de los años 90´ -como texto complementario de los cursos de Termodinámica que imparte del DIQ-; para editarlos y posteriormente publicar su libro.
“Originalmente Hugo empezó a escribir esta obra hace casi 30 años; él sistemáticamente la actualizaba, la decoraba y siempre fue de libre distribución para sus estudiantes y personas deseosas de conocimiento”, dice Andrés Mejía.
Cuando fallece el profesor Segura, Andrés, junto a José Matías y Héctor Quinteros-Lama, deciden recopilar las diferentes versiones que cada uno tenía, y consolidarlo en un libro que fuese accesible a los estudiantes, y a su vez quedara disponible para las generaciones siguientes.
Con el apoyo incondicional de la Dirección del Departamento de Ingeniería Química, en ese tiempo liderada por el profesor Alfredo L. Gordon, y bajo el trabajo de la imprenta Valverde, se elaboraron 300 copias; 100 de las cuales fueron obsequiadas a distintos colaboradores y personas cercanas al medio, y las otras 200 vendidas a un precio equivalente al valor de la versión fotocopiada, especialmente para los alumnos. Finalmente, este proyecto se lleva a cabo con la inscripción de los derechos de autor a la familia Segura-Rodríguez.
«A Hugo nunca le gustó el reconocimiento ni los premios; fue una persona de muy bajo perfil, que pensaba que el trabajo debía ser bien hecho, pues era lo que correspondía (…) y la elaboración de estos apuntes fue siempre para ayudar a los estudiantes, ésa era su idea; en alguna oportunidad él manifestó que la termodinámica que él enseñaba no quería que se perdiera, por lo tanto esto cierra un capítulo de ciertos compromisos que yo adquirí”, comenta José Matías Garrido, quien fue alumno de él y uno de los principales editores del libro.
“Fue el vicedecano, Ricardo Contreras, quien nos incentivó y entregó el apoyo de la decanatura para postular a Atenea”, cuenta Andrés Mejía, quien en noviembre de 2018 año envió una carta a la comisión de la revista, explicando la génesis del texto, junto con cinco ejemplares, lo que oficializaba la postulación.
“A mi juicio como investigador y docente en el área, puedo asegurar que es uno de los mejores textos en castellano del área de la termodinámica clásica y aplicada”, escribió Mejía en uno de los párrafos finales de la carta que redactó para Revista Atenea.
Finalmente, el pasado 30 de abril, Cecilia Rubio, Directora de la revista, informa a Andrés Mejía que el trabajo del profesor Hugo Segura fue galardonado como la Mejor Obra Científica en la categoría libro, frente a otras 23 publicaciones presentadas. A su vez, la Directora reconoce y felicita la gran labor realizada por ambos académicos, y todos quienes colaboraron en la publicación y presentación del texto.
“En un juicio unánime, el jurado determinó que la obra del profesor Hugo Segura constituye un gran aporte en su campo de estudio, pues contribuye a sistematizar el conocimiento alcanzado en materia de termodinámica de los procesos químicos, aportando a la enseñanza de ésta”, se expresa en la carta de Revista Atenea.
Respecto de la resolución del premio, Mejía comenta “A nosotros nos pareció muy bello, porque es como poner las cosas en su justo nivel, en su justo valor, porque nosotros seguimos considerando que es un gran texto, entonces estamos muy contentos”.
La Facultad de Ingeniería felicita a todo el equipo detrás de este proyecto, así como a la familia Segura-Rodríguez por este importante reconocimiento a su laboriosa dedicación académica, cuya principal motivación fue siempre la formación de sus estudiantes de pre y postgrado, y la generación de equipos de trabajo que permitieran formar nuevos investigadores e investigadoras.