- Con una cena realizada el 10 de abril, la Facultad de Ingeniería de la UdeC agradeció los 30 años dirigiendo la Unidad de Desarrollo Tecnológico, UDT, única de su tipo en Chile.
En enero 1994, luego de su Doctorado en Alemania, Alex Berg llegó con “una mochila y 10 contenedores”, así lo recordó durante la cena efectuada en su honor por la Facultad de Ingeniería el pasado 10 de abril.
El Ingeniero Civil Químico de la UdeC, quien trabajó en un consorcio similares a la actual UDT, relacionada con escalamiento y procesos, en el país europeo, llegó con la idea de crear algo similar en Chile, iniciativa que fue apoyada por el destacado investigador UdeC Jaime Baeza (q.e.d.p.), quien lo visitó en Alemania.
De esta manera, y luego de conversaciones con las autoridades y una empresa alemana, que finalmente donó varios equipos, partió la UDT, en un intento serio por realizar investigación aplicada, centro que ha logrado crecer y consolidarse como único a nivel nacional. “Me encantaría que hubiese muchos más, pero el sistema en Chile todavía está muy centrado en investigación fundamental. En crear conocimientos, en paper, eventualmente una patente, pero llegar a aplicarlo es algo que no está muy difundido”, explicó Alex, quien reconoce esta brecha como un obstáculo para la transferencia, pues en Europa, por ejemplo, “las empresas viven de la innovación, una empresa que no innova muere; en cambio, en Chile no es así, una empresa que no innova puede seguir funcionando, porque compite por costos, no por diferenciación, entonces el punto de vista es diferente”.
Actualmente, la UDT desarrolla soluciones tecnológicas para resolver problemas, enfrentar desafíos y cubrir necesidades de grandes y pequeñas empresas a través de investigación aplicada, escalamiento de procesos, producción a escala demostrativa, asesorías y evaluación de proyectos de innovación tecnológica. Más info en https://www.udt.cl/
¿Por qué tomas la decisión de irte de la UDT?
“Hasta aquí, por lo menos, está crecido y tengo la convicción de que hay que retirarse en el momento donde a uno todavía lo echan de menos. ¿Cuál es el momento correcto para retirarse y dejar el camino abierto para que otros asuman responsabilidades? Y yo estoy convencido que es ahora. Por lo tanto, pienso que hoy en día todavía tengo la energía, las ganas de hacer un montón de otras cosas, y probablemente si demoro esta decisión de retirarme, las ganas van a ser menos, las energías van a ser menos, y las posibilidades de éxito también van a ser menos”
La UDT, que partió con cuatro personas y hoy son 65, se encuentra en un muy buen momento, pues está cosechando lo que sembró por muchos años, comentó Berg, para quien la principal fortaleza de este centro son sus personas. “Hay profesionales con una capacidad y una experiencia súper amplia, con un buen contacto con empresas, con conocimientos no sólo de ciencia fundamental, sino que también conocimientos tecnológicos, normativas, saben trabajar en equipo… entonces yo creo que todos esos son puntos importantes. Repito, yo creo que UDT está en un muy, muy buen momento”, puntualizó.
¿Y los desafíos futuros siguen relacionados con ingeniería?
“Sí. Sin duda. Yo soy ingeniero. La verdad es que me gusta un montón de otras cosas… me encantaría dedicarme a mi huerta, pero, a fin de cuentas, profesionalmente, yo soy ingeniero, y me apasiona eso también. Quiero sentarme en el lado opuesto, pues hasta ahora he trabajado estrechamente con empresas, colaborando con ellas, y ahora me quiero transformar en empresario”