Transferir conocimiento con base tecnológico es parte de los objetivos de ingeniería UdeC, y el pasado 25 de marzo se dio un nuevo paso con la firma de un licenciamiento de prueba que permitirá validar el uso de sábanas de monitoreo no invasivo que ha liderado el investigador Esteban Pino, esta vez, para pacientes con cáncer.
Health Tracker es un emprendimiento de base tecnológica – ubicado en Santiago – focalizado en el área salud y gestión de pacientes. “Con el profesor Pino hemos estado trabajando hace un tiempo con la sábana y monitorear pacientes postrados, en cuidados paliativos”, explica Fernando Moreno, cofundador y gerente general de la start up. “En este grupo de pacientes es relevante evaluar su movilidad y la frecuencia respiratoria. La movilidad para el grado de funcionalidad y disminuir la velocidad del deterioro, también prevenir las úlceras por presión y, por otro lado, la frecuencia respiratoria entrega información útil a los médicos tratantes para la administración de opoides”, puntualiza Moreno.
¿Cómo funciona? La sábana confeccionada de algodón tiene integrado varios sensores electrónicos. Se instala sobre el colchón del paciente y la presión que ejerce la persona sobre la misma va arrojando ciertas señales. Estas llegan al equipo de ingeniería de Health Tracker y posteriormente al equipo de gestión en salud. Cabe señalar que, en sus primeras etapas de desarrollo, este dispositivo estuvo focalizado en el estudio del sueño, para detectar apneas, pruebas que arrojaron prometedores resultados. Ahora, se busca llegar a otro tipo de pacientes.
“El procesamiento de esos datos es clave para obtener información útil para la toma de decisiones y es quizás la parte más compleja, ya que dependiendo del tipo de pacientes, se diseña y se elabora un tipo de procesamiento específico”, explica Esteban Pino, académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica, quien destaca además que las pruebas que se harán en pacientes con cáncer fue aprobado por el Comité de Ética de Redsalud, procedimiento clave en el proceso de transferencia.
Por su parte, Jaime Jiménez, Ingeniero Civil Biomédico UdeC, cofundador de Health Tracker, Científico de Datos en la empresa, comenta que la validación se está trabajando con otra start up llamada “Atención Domiciliaria”. “Vimos una oportunidad que era el uso de esta tecnología para pacientes que se encuentran postrados y poder tener un seguimiento continuo de la información. Actualmente, la atención que se tiene para este tipo de pacientes es tradicional, es decir, mediante visitas médicas de diferentes profesionales y estamos pensando en cambiar ese paradigma a uno que sea de monitoreo continuo y además que no sea invasivo, ya que estamos hablando de pacientes que están en una etapa terminal de su vida y buscamos evitar que sufra cuadros de dolor severo”.
OTL UdeC: vigilantes de oportunidades de impacto
Una de las funciones de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento, OTL, es hacer seguimiento de las tecnologías que llevan adelante los investigadores en la UdeC. “Los apoyamos en el levantamiento de fondos y en general, la tecnología que ha estado desarrollando el Dr. Pino genera bastante interés por la alta prevalencia de pacientes que están en condición de postrado o movilidad reducida”, cuenta Claudio Rozas González, Gestor Tecnológico de la OTL UdeC
Este tipo de licenciamiento de prueba busca arrendar en forma exclusiva y por un tiempo determinado, el uso de la tecnología para que puedan hacer las validaciones. Se genera una cooperación mutua, donde la universidad y la empresa trabajan para obtener un producto que sea factible de ser implementado y que impacte a la sociedad.
Health Tracker: corazón UdeC
Varios son los estudiantes de pre y postgrado de la UdeC que están trabajando en Health Tracker, entre ellos, Antonia Baeza, Gonzalo Rojas y Sergio Villagra.
“Aún estoy viendo si continúo el magíster acá o en Santiago. En mi memoria – que se aplica a la empresa – estoy desarrollando un chatbot para el cuidado informal o familiar de los pacientes oncológicos”, cuenta Antonia, quien explica que actualmente el área de coordinación de oncología es la que se dedica a resolver todas las dudas que tengan los cuidadores informales, es decir, familiares del paciente. Por ejemplo, si al paciente le aparece una escara, cómo se le puede cuidar o en qué posición debe estar. “Todas esas dudas van siendo repetitivas y que demandan mucho tiempo del área administrativa en responder, que perfectamente se podrían automatizar”, explica la joven, quien aprovecha la instancia de motivar a más mujeres a estudiar ingeniería, “ya que se ha demostrado que las mujeres tenemos todo el power para realizar un trabajo tal como los hombres”.